Fuegos artificiales: su impacto en la contaminación
Los fuegos artificiales son un símbolo de alegría y celebración, especialmente en fechas como la Navidad y el Año Nuevo. Sin embargo, su uso masivo plantea serias preocupaciones ambientales y sanitarias debido a los efectos que tienen sobre la calidad del aire y la salud humana
Por María Sol Muñoz
A+S dialoga con Eduardo Sotero , especialista en contaminación ambiental y daños a la salud respiratoria producto de la contaminación pirotécnica .
¿Qué tipo de contaminación producen los fuegos artificiales?
La quema de pirotecnia libera grandes cantidades de material particulado (PM), un contaminante atmosférico de origen antropogénico. Durante y después de los festejos, las concentraciones de PM en el aire aumentan drásticamente, convirtiendo el cielo festivo en una fuente de riesgo para la salud.
Según investigaciones realizadas por la Universidad de Birmingham y el Health Effects Institute de Boston, publicadas en Atmospheric Research, los niveles de PM suelen regresar a valores normales dentro de las 24 horas posteriores al uso de fuegos artificiales. Sin embargo, durante ese periodo, las personas están expuestas a partículas finas que pueden ingresar profundamente en los pulmones y desencadenar problemas respiratorios y cardiovasculares.
¿Qué consecuencias para la salud conllevan?
La exposición a corto plazo a estas partículas puede agravar enfermedades como el asma, la enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC) y las infecciones respiratorias. También se ha asociado con síntomas como tos, dificultad para respirar y, en casos extremos, con el desarrollo de cáncer de pulmón.
Los metales utilizados para dar color a los fuegos artificiales, como aluminio, bario y cadmio, también representan un peligro. Por ejemplo, el polvo de aluminio puede causar fibrosis pulmonar, el cromo de bario tiene efectos tóxicos para las células pulmonares y el cadmio inhalado puede provocar enfisema tras exposiciones crónicas.
¿La pirotecnia puede producir algún efecto en el clima o producir nubes toxicas?
Nubes toxicas no puede llegar a producir porque se necesitarian una gran cantidad de recursos, sin embargo las condiciones meteorológicas juegan un papel importante en la acumulación de contaminantes durante las festividades. En estaciones como otoño e invierno, donde predominan las bajas temperaturas y la falta de viento, los contaminantes se concentran más fácilmente. Además, el profesor Francis Pope, coautor del estudio, señala que la alta densidad de PM producida por los fuegos artificiales puede reducir la visibilidad entre un 10% y un 92%, dependiendo de las condiciones climáticas.