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Argentina y la felicidad: ¿Dónde estamos en el ranking global?

Argentina escala posiciones en la lista de los países más felices

Por Judith Scheyer

¿Por qué Finlandia sigue siendo el país más feliz del mundo?

Por octavo año consecutivo, Finlandia fue elegido como «el país más feliz del mundo», según un informe coordinado por la ONU. Este informe, que se realiza anualmente desde 2012, destaca a los países nórdicos como los principales referentes de bienestar y calidad de vida. Detrás de Finlandia, se ubican Dinamarca, Islandia y Suecia, completando un podio que refleja la estabilidad y los altos estándares de vida en esta región, según el informe anual publicado por el Centro de Investigación del Bienestar de la Universidad de Oxford.

Diversos factores, como su cultura de confianza, igualdad y solidaridad, han contribuido a que este país mantenga su posición de liderazgo. Además, su sistema de bienestar social, educación de calidad y bajos niveles de corrupción son pilares fundamentales que sostienen la felicidad de sus ciudadanos.

Contrastes en el ranking: los países menos felices

Mientras Finlandia y otros países nórdicos encabezan la lista, el informe también revela las realidades más duras. Afganistán se encuentra por segundo año consecutivo en el último lugar, afectado por una grave crisis humanitaria tras el regreso al poder de los talibanes en 2021. En el pasado, países como Togo, Burundi, República Centroafricana y Sudán del Sur han ocupado este desalentador puesto, reflejando conflictos políticos y crisis económicas profundas.

En cuanto a otros países, Estados Unidos experimentó un declive importante en la clasificación, cayendo al puesto 24, su posición más baja desde que comenzó el informe en 2012, cuando había alcanzado el puesto 11. Esto refleja cambios en la percepción de bienestar de su población, vinculados a factores como la creciente polarización política y el aumento de la soledad social.

¿Dónde quedó Argentina en el ranking?

Argentina logró avanzar en el ranking global de felicidad, ubicándose en el puesto 42. Este es el mejor resultado del país desde 2019, lo que marca una tendencia positiva en comparación con años anteriores. La mayoría de los países de América Latina y el Caribe han escalado posiciones en comparación con el año anterior, destacándose particularmente los casos de México y Costa Rica, que lograron ingresar al top 10 por primera vez en la historia del informe.

Las salidas de Kuwait (del puesto 13 al 30) y del Reino Unido (del 20 al 23) permitieron el ascenso de nuevos países, mientras que Argentina subió del puesto 48 al 42. Esto refleja una mejora en algunos de los factores evaluados, como el apoyo social y la percepción de bienestar general de la población. Otros países que han mejorado significativamente su posición en los últimos años incluyen Serbia (31), Bulgaria (85) y Georgia (91).

¿Cómo se mide la felicidad?

La edición 2025 del informe fue elaborada en colaboración entre la encuestadora Gallup, la Universidad de Oxford y la Red de Soluciones para el Desarrollo Sostenible de la ONU. Su objetivo es medir la felicidad para que los responsables de políticas públicas puedan utilizarla como un indicador del progreso social.

Para ello, el estudio emplea métricas que van más allá de los tradicionales indicadores económicos y adopta un enfoque subjetivo, basado en la percepción personal sobre la vida, así como en la presencia de emociones positivas y negativas. Seis factores clave determinan la clasificación de los países: el PBI per cápita, que refleja el nivel de ingresos y desarrollo económico; la esperanza de vida saludable, un indicador del bienestar físico; el apoyo social, es decir, la disponibilidad de alguien en quien confiar en momentos difíciles; la libertad para tomar decisiones sobre la propia vida, clave para el desarrollo personal; la generosidad, medida a través de donaciones y actos altruistas; y la percepción de la corrupción en el gobierno y las instituciones.

Estos factores, combinados con la autoevaluación de la vida y la experiencia emocional de las personas, permiten establecer un ranking global de felicidad.

¿Cuál es la receta del éxito finlandés?

Los especialistas indican que la cercanía con la naturaleza y el buen equilibrio entre el trabajo y la vida privada o tiempo de ocio suelen ser un punto clave en la satisfacción de los finlandeses. Además, su sociedad se basa en la igualdad de oportunidades, con educación y atención médica gratuita y pública, lo que refuerza la cohesión social y eleva los niveles de felicidad.

En Finlandia, el éxito no se mide únicamente por el nivel de ingresos, sino por la calidad de vida. A diferencia de otros países donde el progreso individual está ligado a logros económicos, en Finlandia la estabilidad emocional y social son fundamentales. La institucionalidad, los bajos índices de corrupción y la percepción de credibilidad en las instituciones también son primordiales para la evaluación de la felicidad en el país.

¿Qué desafíos enfrenta el mundo en términos de felicidad?

El informe de este año también resalta preocupaciones crecientes sobre el bienestar global. Un dato alarmante indica que en 2023, el 19% de los adultos jóvenes en el mundo aseguraron no tener a ninguna persona en quien confiar para brindarles apoyo social. Esto representa un incremento del 39% en comparación con el dato registrado en 2006, lo que evidencia un problema creciente de aislamiento social.

Además, ligado al auge de los movimientos ultraderechistas en Europa, el reporte sugiere que «la disminución de la felicidad y la confianza social en Estados Unidos y partes de Europa se combinan para explicar el aumento y la dirección de la polarización política y los votos antisistema».

La felicidad y su impacto en las políticas públicas

El Reporte Mundial de Felicidad, publicado anualmente desde 2012, busca ser más que una simple clasificación. Su propósito es ofrecer una herramienta útil para que los gobiernos puedan implementar políticas que mejoren la calidad de vida de sus ciudadanos. Países como Finlandia han demostrado que la inversión en bienestar social y equidad impacta directamente en la percepción de felicidad de la población.

Para Argentina, el ascenso en el ranking es una señal positiva. Pero se debe mejorar. Estrategias que contribuyan a mejorar el bienestar general, el acceso equitativo a oportunidades, políticas que apunten a una sociedad más solidaria y cohesionada. Si se trabajase con estos objetivos, el próximo año quizás, nos ubican unos puntos más arriba en el ranking de los países más felices del mundo.

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